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Todo el rato te estoy hablando de lo horrible pero quiero relajarte un poco a tí y darme a mí un respiro que me hace mucha falta.

Con tantas cartas me he olvidado de lo que te he contado y lo que no, asi que si me repito, me puedes llamar lo que sea .

Dicho esto por fin encontré un colegio para Pablo, recorri muchísimos y por fin di con uno en cuya empresa yo habia trabajado en Madrid en las oficinas. Era un colegio que tenia sucursales en toda américa, de modo que el director habia sido compañero mio, no sabes que alegria cuando al concertar la cita nos vimos. Evidentemente no lo pensamos dos veces y le matriculamos allí.

Hablando con él le comenté lo sola que estaba en Buenos Aires, echaba de menos hablar con mis amigas ..en fin...entonces me dijo eso lo arreglo yo ,organizo una cena con otros españoles que traen aquí a sus hijos y asi les conoces y puedes salir con ellas, son gente muy maja. Y asi fué como conocí a las que fueron mis amigas durante estos años, ya que se iban despidiendo una tras otras porque cumplian los contratos de los maridos.

Cada una de ellas era totalmente diferente a mí, yo creo que porque yo nunca olvidé la pobreza en la que viví de joven y lo dificil que era la vida, ellas venian de unos escalones más arriba y no se conmovian con las mismas cosas que yo. Llegue a tener un mote que en el fondo me hacia sentir orgullosa "la roja de Martinez" (martinez es un barrio donde vivian muchos españoles)

En las reuniones mientras ellas hacian corrillo hablando de las mucamas (asistentas, en la mayoria internas)yo me metia en la conversación de los hombres hablando apasionadamente de economia, política, vinos etc, ya sabes que tengo una facilidad para hacerlo.... Por supuesto allí eran todos de derechas, Emilio no se pronunciaba de manera que nunca metia la pata, pero a mi la pasión me podía y les echaba un pulso a cualquiera de ellos, y cuando algo me ponia contra las cuerdas, un poco de populismo les desarmaba.

En el fondo les gustaba y siempre querian que fuesemos a sus cenas ya que no sabia , no sabia preparar un buffet froid, despues aprendí, pero ponia mil excusas llevaba un buen vino o un helado riquisimo que les gustaba mucho y chao...

Bueno corazón por hoy me parece que ya me enrollado bastante. Siempre tengo la sensación de que las cartas son muy largas y acabes harta de ellas, cuidate mucho.